5 lenguajes del amor ¿hablas el mismo idioma que tu pareja?


Cada vez es más habitual encontrar en la clínica parejas que dicen que ya no se sienten queridos por sus parejas o que después de casarse o irse a vivir juntos las cosas han cambiado. Cuando hablamos de amor, tenemos que tener en cuenta que hay diversas formas de expresarlo y que cada uno tenemos nuestro propio idioma para hacerlo. A veces vemos que hacemos verdaderos esfuerzos por demostrar al otro que le queremos, pero da la sensación de que no sirve para nada ya que el otro no lo entiende. Eso se debe a que cada miembro de la pareja puede estar hablando un idioma distinto.

Las personas hablan diferentes lenguajes de amor.

Cuando hablamos de idiomas, resulta fácil entender que si nosotros hablo español, una persona que sólo habla chino no nos va a entender. Con el amor pasa lo mismo. Existen diferentes lenguajes y si no hablamos el mismo que nuestra pareja, ya podemos expresar que la queremos, que no nos va a entender.
El Dr. Gary Chapman defiende que hay 5 lenguajes para transmitir amor. Es importante conocer cuál es nuestro lenguaje principal y cuál es el de nuestra pareja para poder comunicarnos de una forma efectiva. Si queremos que el otro nos entienda, tenemos que estar dispuestos a aprender a hablar el lenguaje de nuestra pareja ya que lo que hace a una persona sentirse querida, no siempre hace al otro sentirse igual.



Los lenguajes propuestos por Gary Chapman son:

1. Palabras de afirmación: Este lenguaje incluye cumplidos verbales, palabras de aprecio, palabras de ánimo, palabras humildes y amables. Las personas que hablan este lenguaje son aquellas que necesitan oír cosas positivas. Lo que les hace sentirse queridos es escuchar que su pareja les valora, apoya y anima. Un ejemplo sería “estás muy guapa con ese vestido”, “qué bien has ordenado nuestro armario”, “cómo me gusta cuando me ayudas con los niños”, “eres un gran trabajador”, “te agradezco que te ocupes de sacar la basura”, etc.

Todas estas afirmaciones ayudan a que la persona sienta y perciba el amor que siente su pareja.


2. Tiempo de calidad: Este hace referencia a las personas que necesitan que su pareja esté presente con atención completa. Hoy en día es cada vez más frecuente que estemos a mil cosas a la vez. Para las personas que hablan este lenguaje, que su pareja no les preste atención al 100% es una muestra negativa de cariño.

El tiempo de calidad implica mirar a la persona a los ojos cuando se habla, dedicarle tiempo para hacer cosas juntos sin estar pendientes de otras cosas, tener conversaciones de calidad (escuchando y mostrando interés por lo que dice), hacer actividades que sean placenteras para ambos…todo esto realizado con atención plena, estando en el momento presente y no pensando en el trabajo o en otras cosas.


3. Recibir regalos: Hay personas que para sentirse queridas necesitan recibir regalos de su ser querido. Los regalos son símbolos visuales de amor. Esto no significa que tengan que ser cosas caras, si no algo que demuestre que la persona estaba pensando en nosotros y ha querido demostrarlo. Para una persona cuyo lenguaje principal sea este, en momentos críticos,  la presencia física de su pareja es el mayor regalo, es el regalo de uno mismo. La ventaja que tenemos si nuestra pareja habla este lenguaje, es que es el más fácil de aprender.


4. Actos de servicio: Aquí se incluyen todas aquellas cosas que podemos hacer por nuestra pareja, como hacer la casa, cocinar, lavar el coche, recoger a los niños, cambiar pañales…hay personas que necesitan ver que su pareja hace cosas por ellos para sentirse queridos.

Cuando nuestra pareja no habla este idioma pero nosotros sí, sí queremos que haga algo por nosotros, deberíamos pedirlo, pero no demandarlo.  Las peticiones dan dirección al amor mientras que las demandas lo detienen. Si alguien se siente forzado a hacer algo, si lo hace no será como muestra de amor sino para evitar una discusión. Somos libres de hacer lo que nos pide nuestra pareja o no, pero si este es el lenguaje de su ser querido, haciéndolo conseguirás que se sienta querida o querido.


5. Toque físico: El último lenguaje incluye todo el contacto físico como besos, caricias, masajes, coger la mano…y las relaciones sexuales. Este también es fácil de aprender si es el que nuestra pareja habla. Para estas personas, un beso antes de salir de casa, un abrazo o una caricia en el hombro son importantes y necesarios para poder percibir que su pareja les quiere.



Es importante conocer cuál es el lenguaje principal de nuestra pareja para poder hablar su mismo idioma, pero también es primordial conocer el nuestro propio. Habrá personas que al leer esto sepan claramente cuál  es el suyo, mientras que otras tendrán  que pensarlo un poco. Os dejo aquí tres preguntas que os podéis hacer para averiguar qué lenguaje es vuestro principal.
  • ¿Qué cosas que tu pareja hace o deja de hacer es lo que más te duele? Lo contrario a eso, será lo que te haga sentir más querido o querida.
  • ¿Qué es lo que más le pides a tu pareja? Eso será lo que necesitas para sentir que te quiere
  • ¿De qué manera expresas por lo general que quieres a tu pareja? Seguramente esa manera sea la misma que tú  necesitas para sentirte así.


Aprender el lenguaje de tu pareja no es obligatorio, pero si no lo haces, es posible que la otra persona nunca llegue a enterarse de lo que intentas decirle. Si quieres a tu pareja, utiliza tu energía y esfuerzos en la dirección correcta y pídele que haga lo mismo por ti. Es posible que en una pareja ambos hablen el mismo lenguaje, pero no suele ser lo más frecuente. Cada uno tenemos nuestras propias necesidades y una forma única de ver la vida y entender el amor y la relación de pareja. Es por eso que es tan frecuente encontrar relaciones en las que no se entiendan del todo a la hora de expresar amor.

El propósito del amor no es hacer algo que tú  quieras, sino hacer algo por el bienestar de la persona que quieres.

Bibliografía
Chapman, G. (1996). Los cinco lenguajes del amor. Unilit. Miami.

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